miércoles, 15 de julio de 2009

¿Qué piensan las gentes cuando se entrometen en vidas ajenas?
¿Qué piensan cuándo previo al daño, intentan acercarse con pies de plomo?
¿Qué piensan cuándo, con los zapatos casi derretidos, se aceran al fuego del inconveniente?
¿Que piensan cuándo hecho el daño, quedan atrapados en la culpa que los condenará por un rato?
Y cuando no pueden escaparse, ¿acuden al homicidio de la confianza? ¿Cómo harán para esconder ese gordo y sangrante cuerpo? ¿O lo cargan en sus espaldas durante toda su vida? ¿Podrán soportar el olor a podredumbre que sale debajo de sus camas? ¿Se contarán los cadáveres entre ellos? ¿Qué será de sus vidas?

4 comentarios:

Miks dijo...

"el camino al infierno esta regado de buenas intensiones"

Sheeba Baby dijo...

¿te lastimaron Jor? Besos

Lu dijo...

...quedan atrapados en la culpa que los condenará por un rato?

Hacerse responsable de lo cometido más que sentirse culpable es una posición más constructiva pero sólo limitada a los valientes, ¿no te parece J?

J dijo...

Lu: Generalmente esos valientes, de los que vos hablas, tienen la dignidad de hacerse responsables y contemplan la posibilidad de la construcción... en este caso esa posibilidad no se dió, ni siquiera apareció ese tufillo a pseudo sensatez.
En fin.