lunes, 26 de abril de 2010

Cómo saber lo que se esconde dentro de un alcaucil

como saberlo si en realidad
la desesperación por conocer
nos altera

entonces el alcaucil presenta la dificultad
de tenerle distancia

su coraza verdinegra,
su corazón palpitando,
su mugre esperando ser lavada,

nuestros dientes abstemios
por esa mal parida falta de razón
que los enceguece.

Entonces me pregunto
cómo podemos conocer lo que hay dentro de un alcaucil.

Una vez mas lo pienso.

Entonces acudo a vos
te pregunto que esconden los alcauciles en su interior.

Vos con tu mano, tu manecita, dibujas un circulo en el aire,
encerrando un premio
el secreto

el dolor
de la incertidumbre
y te volves hacia mi.

"Hoja por hoja", me decis.

 Verde finitud.

De a poco vas quitando sus pieles. 
Tu mano encima de mi mano. Una sola masa de dedos trabajando.

Entonces,
qué se esconde dentro de los alcauciles.

"Tiempo", me decis.
"La fruta de la paciencia", te respondo.

2 comentarios:

Andrea dijo...

Bueno, una vez encontré un enorme gusano en el corazón del alcaucil. El corazón del alcaucil esconde, cada vez, una sorpresa diferente, impredecible. Metáfora de la humanidad.

J dijo...

Si hubiese sabido que encontraste un gusano en el corazón de un alcaucil, la poesía hubiese tenido un extra de magia...